Gran dibujante busca personaje

Con agrado publico este homenaje que mi amigo Richard quiere rendirle a su padre, el día de su cumpleaños.

Al cumplirse hoy setenta y tres años del nacimiento del dibujante Avelino García, testigo privilegiado de la historia reciente del comic chileno, quisimos rendirle un pequeño homenaje. Este texto apareció publicado en el sitio Ergocomics (http://www.ergocomics.cl/sitio/index.php?idele=20040408101341) en abril del año pasado.


Avelino García Llorente:

Gran dibujante busca personaje

Por Mauricio García

Mi padre es lo que se podría decir un protagonista privilegiado de la historieta chilena, pero su mayor pecado es que nunca tuvo un personaje propio (salvo Coffeybill, que fue con guión del director de Bandido). En cambio, estuvo integrado en la mayoría de los grandes equipos". Así nos describió Richard García, periodista, la trayectoria de su padre, don Avelino García Llorente.
Interesados en saber algo más de este dibujante, cuyas escasas referencias se circunscriben a su participación en revistas como "Zorro", "Guerrillero" y la citada "Bandido", nos contactamos con él y logramos descubrir algunos antecedentes de su vida.

Nació en Villalón de Campo, lugar situado en Castilla La Vieja, España, el 27 de septiembre de 1932, pero llegó a Chile, casi directamente a la ciudad de San Fernando, al cumplir apenas un año de vida.

En San Fernando estudió con los Padres Maristas hasta tercero humanidades y término sexto humanidades en el Liceo. No dio bachilletaro, ya que su padre quería que fuera comerciante, pero ya en esos años la pasión por el dibujo lo atraía. Hacía banderines, decoraciones, ilustraciones, etc., lo que le acarreó algún problema con sus profesores, que no siempre celebraban sus caricaturas. Su gran lectura era "El Peneca", como la mayoría de los niños y jóvenes de esos años.

Estudió dibujo por correspondencia, con el método del famoso Alex Raymond, pero la muerte del dibujante lo obligó a continuar con los argentinos de la Escuela Panamericana de Arte.

En 1956 o 1957, según recuerda, se decidió a viajar a Santiago y, felizmente, ingresó a trabajar a "El Peneca", donde realizó, por un tiempo breve, ilustraciones infantiles junto a María Silva Ossa, hermana del gran dibujante Mario Silva Ossa, más conocido como Coré, ya fallecido en ese entonces. También estaban la ilustradora Elena Poirier y dibujantes como Alfredo Adduard, ya casi inválido, Themo Lobos y el español Víctor de la Fuente. También dibujó en la revista "Rosita", de carácter femenino, donde realizaba temas de moda.

Son los años finales de los cincuenta, en que la publicidad rinde mejores dividendos que dibujar en revistas, por lo que consigue trabajo en Emelco, empresa dedicada al cine, donde se realizaban los famosos noticiarios que se presentaban en las matinés. Incluso recuerda haber participado en la animación de un personaje de Themo Lobos, el mexicano "Penjamón".

Se casa en 1962 y tiene a Richard, su único hijo. Entre la realización de trabajos para publicidad, en la empresa Emelco, y dibujos para el famoso "Almanaque 18", llegamos a la época de la creación de un departamento artístico en Editorial Zig-Zag, dedicado a la historieta, el que comienza a atraer a los dibujantes del medio, inicialmente para retocar y rellenar revistas extranjeras, como las Disney, y series policiales.

Así, con la ayuda del dibujante Lincoln Fuentes, ingresa, por segunda vez, a la famosa editorial Zig-Zag y comienza a dibujar en la revista "Aventuras de Walt Disney", que, con el correr del tiempo se transforma, simplemente, en revista "Zorro".

La revista "Zorro" comienza a realizarse en Chile, con guiones de José Zamorano o Germán Gabler y dibujantes chilenos, como el mismo Gabler, Enrique Calvo, Julio Berrios y, por supuesto Avelino García que, pese a la prohibición expresa que la empresa puso de firmar las aventuras de este personaje, por petición a su vez de Walt Disney Productions, lo hacía como Lino o Avelino. Señala que impuso el criterio de utilizar caras de conocidos artistas de cine para los personajes de la historieta. Sobre los dibujantes de este personaje, tiene un especial recuerdo de una dibujante llamada Lidia Jeria, que posteriormente se trasladó a México. De ella conserva al menos un original, junto a muchos de sus propios originales.

En Zig-Zag le tocó dibujar o pasar tinta muchas historietas, en un trabajo muy cercano a Mario Igor y Manuel Cárdenas, en revistas como "Jinete Justiciero", con tema de cowboy, y "El Siniestro Dr. Mortis", en la que realizó varias portadas y varias historietas, entre ellas una historieta que recuerda, llamada el "Almohadón diabólico".

En revista "Far West", es uno de los primeros dibujantes del primer personaje de la revista, el sheriff Ray Hunter, creado por un guionista boliviano llamado Rodolfo Bellamy. Al volver a revisar sus dibujos, en los primeros números de la revista, señala que en esos años le faltaba mucho dominio del dibujo y la figura humana. También recuerda que realizó algunas historias de Mawa, para revista "Jungla", junto a Manuel Cárdenas.

En la época de la UP, durante el periodo de Editorial Quimantú, dibujó mucho en la revista "El Jinete Fantasma", antiguo feudo del dibujante Juan Araneda, de quién recuerda que era un dibujante muy rápido, pero con grandes conflictos sicológicos, lo que lo llevó a un trágico final años después.

Son años en que le toca dirigir la historieta seudo histórica "Manuel Rodríguez", personaje secundario que terminó relegando al "Jinete Fantasma", que era una serie del oeste que, en esos años, mantenía al personaje en aventuras ambientadas en México, luchando contra los franceses. Finalmente, la revista "El Jinete Fantasma" terminará transformándose en revista "Guerrillero", con una orientación ideológica de izquierda. Lamentablemente para él, no estuvo de acuerdo con los cambios ideológicos impuestos en el guión y salió de Quimantú en mayo de 1973, antes del golpe. Señala que era una versión poco loable de la historia de Chile y por lo mismo las ventas eran malas.

Según recuerda, el fracaso de una revista traía aparejada la salida de su director, sin perjuicio de que no hubiera estado de acuerdo con la forma de tratar el personaje.

En Quimantú, recuerda haber trabajado con el dibujante Guillermo Durán, Guidú, en algo para niños. ¿Revista Cabro Chico? No lo recuerda con exactitud, pese a que en dichos años Guidú era uno de los dibujantes más conocidos de Cabrochico, con su personaje "Mañungo", un niño que vivía en las montañas.

Después de Quimantú, se aleja de la historieta. Se va a Concepción, al Diario El Sur, para hacer dibujo publicitario, pero el otro dibujante del diario lo aísla, "le hace la cama", y se queda sin contrato. Trabaja en la agencia publicitaria Centauro y realiza mucho trabajo free lance, tales como letreros luminosos, camineros, etc., principalmente con agencias como publicidad latina, Sale's Way y varias otras, hasta 1980. De ahí rebotó en decenas de proyectos o iniciativas que no duraron mucho.

A principios de los años ochenta, participó en revista "Condorito", en ese tiempo perteneciente a Editorial Pincel, junto a los dibujantes Samuel Gana y Nelson Soto, cuando Pepo ya no hacía el personaje.

Años después, realiza diagramación y caricatura política y de espectáculos en revistas como "Alternativa", "La Chuchoca" y "El Estilete", hasta fines de la década. Pero es en revista "La Chuchoca" donde realiza la mayor producción de trabajos, con cientos de caricaturas que firmaba A.G. o A. Gallo. Luego se le unirán, en esa publicación, los dibujantes Nelson Soto y Guillermo Varas.

Paralelamente, hizo animación con Alejandro Arce y en otras empresas del ramo, como CineAnimadores, hasta hace unos dos o tres años. El señala que ingresó a Artegraf por concurso y que un nieto del famoso dibujante Coke, también llamado Jorge Délano, que firmaba sus trabajos como Grafo, le enseñó dibujo animado. Trabajó junto a Carlos González (creador de Tevito), Alejandro Rojas, Máximo Carvajal, Nelson Soto y, por poco tiempo, con Themo. El dibujante Christiano, que también realizó labores en animación por esos años, lo recuerda como uno de los que sacaba el trabajo, pese a los problemas.

A fines de los ochenta, tenía un personaje del oeste, en estilo caricaturesco, llamado "Aventuras del Capitán Coffeybill", que presentó a Javier Ferreras para una revista que preparaba, la hoy legendaria "Bandido". Como no se manejaba en los guiones, se encargó de ellos el propio Ferreras. Pese a su calidad y buen trabajo, la serie terminó cuando la revista cambió su línea editorial, centrándose en un cómic más adulto. Avelino, con este cambió, probablemente perdió la posibilidad de volver a la historieta y tener un personaje propio que lo elevara al reconocimiento público.

Actualmente, está jubilado de una AFP, pero como su trabajo era semi independiente y las agencias publicitarias no pagaban las imposiciones, su situación es similar a la de la mayoría de los antiguos dibujantes chilenos jubilados, es decir, bastante precaria. El sigue con ánimo de trabajar y ocupando nuevas técnicas.

Junto a otros dibujantes, recibió un homenaje por su participación en la revista "El Siniestro Dr. Mortis", en la Biblioteca Nacional, en noviembre de 2003, dcon motivo de la celebración de la Semana de la Historieta, preparada por Ergocomics gracias a un proyecto Fondart. Fue un momento de emotivo reencuentro de muchos dibujantes con el famoso guionista de la publicación, Juan Marino, actualmente radicado en Argentina, de visita en Chile para la ocasión.
Agradecemos a Richard García haberse comunicado con Ergocomics, lo que permitió conocer personalmente a Avelino García o, en el caso de algunos de los integrantes de esta agrupación, reencontrarse con él.

Mauricio García C.